Bloque M – R
En este tramo, la lengua corre con fuerza, llevando en su cauce memoria, alimento y esperanza

En estas letras, la lengua se vuelve caudalosa, como el río en tiempo de lluvias. La M, N, O, P, Q y R reúnen voces que nombran animales de monte, frutos que alimentan el alma y expresiones que fortalecen la comunidad. Son sonidos que caminan entre la chacra y la fiesta, entre el trabajo y la oración, tejiendo la vida cotidiana con la herencia de los ancestros. Cada palabra aquí contenida es como un puente de raíces y alas, donde la selva y la voz humana se funden en un mismo latido.
